Archivo DEM
En el Juzgado Especializado de Instrucción “B” de San Salvador, la Fiscalía General de la República solicitó hoy que siete presuntos implicados en la masacre de 11 personas el cantón Agua Escondida, en San Juan Opico, La Libertad; sean enviados a juicio.
Al finalizar la audiencia preliminar, la jueza que está conociendo del caso programó para el próximo martes la resolución en la que determinará si accede a las pretensiones del Ministerio Público, entre ellas la admisión del testigo criteriado “Islámico” una serie de elementos probatorios, incluido un vídeo que fue extraído del teléfono celular de uno de los capturados.
El fiscal del caso sostuvo que en el plan inicial de los integrantes de la Pandilla 18 no estaba asesinar a estas personas, ya que ese día iban en busca de miembros de la Mara Salvatrucha para vengar la muerte de uno de sus compañeros.
“A ellos los matan por el hecho que una de las víctimas intenta escapar con el objeto de salvar su vida ante la creencia de se le iba a ocasionar un mal, los pandilleros se encuentran con estas personas y con el objeto de no tener testigos y poder tener el tiempo necesario para ir al caserío para atentar en contra de miembros de la mara contraria deciden privarlos de libertad y los iban ir dejar amarrados en el interior del terreno”, manifestó el representante del Ministerio Público.
El fiscal del caso sostuvo que existen los suficientes elementos contundentes para que se decrete un auto de apertura a juicio, la columna vertebral de la investigación es el testigo criteriado “Islámico” quien ha colaborado con la Fiscalía contando la forma en que se planificó y ejecutó el hecho el 3 de marzo del año pasado, en el múltiple crimen el testigo estuvo presente y sirvió de “poste” (vigilante) mientras sus demás compañeros asesinaban a las víctimas.
La planificación se hizo a las 7:00 de la noche en el cantón La Coyotera, Quezaltepeque, donde concurrieron 18 pandilleros de diversas canchas (territorios controlados por una pandilla) la voz de mando la tuvieron los palabreros José Luis Polanco Escalante, alias, “Enano” y José Alfredo Valle Landaverde, alias, “Coche”, quien murió en un enfrentamiento con agentes policiales el14 de abril de 2016, en kilómetro 7 carretera a Los Planes de Renderos, el resto de acusados son gatilleros y soldados (nivel bajo de la pandilla) quienes pasaron la noche en ese lugar para salir hacia el cantón Agua Escondida, en San Juan Opico, a las 4:30 de la mañana.
En un principio la representación fiscal planteó que el móvil era cometer un homicidio en territorio de la Mara Salvatrucha para que las autoridades pensaran que esa pandilla era la responsable y centraran el accionar contra la célula que domina la zona, pero en el dictamen de acusación presentado previo a la audiencia preliminar el Ministerio Público cambió la versión y señala que el plan era asesinar a pandilleros rivales para vengar a un compañero.